La escalada...

Una de las últimas cosas que he hecho es el de la escalada, en donde he practicado algo de trakking y rapel.
Una de las cosas más fascinantes son el de sentirse tan pequeño ante tanta maravilla natural que nos rodeo y que no somos capaces de admirar porque siempre la vemos de la misma perspectiva.
Un caso particular es el del famoso cerro Esmeralda, del que hasta Darwin ha hablado desde su visita a este histórico puerto. Desde la ciudad se observa el siempre igual cerro, con su parte central en la llamada cruz, con su ya antigua atracción del único reloj de luces conocido. Lo fascinante que muchos creen que la cruz está en la punta del cerro, pero otros muchos saben que no es así por sus visitas a esta cruz durante la semana santa, pero el cerro se desarrolla por al menos 100 metros más (de altura) y luego de esto se encuentra uno que uno de los escenarios naturales más hermosos de nuestra localidad, y desde ahí mismo se observa la ciudad en todo su esplendor. Pronto mostraré imágenes de este lugar, un escenario que solo logra enamorarse más de esta hermosa región.